Qué es
Este espacio comprende un acantilado costero de gran verticalidad en algunos tramos, flanqueado al oeste por una rasa costera en la desembocadura del barranco de Godínez (la Calera), y al este por la playa de los Roques. El sector occidental está ocupado por uno de los mejores palmerales de la isla, junto a tabaibales y especies halófilas (viven en suelos salinos) que se asientan en una zona de antiguos abancalados. Esta vegetación es, no obstante, sólo una fracción de una comunidad exuberante que en el pasado poblaba todo el lugar, cuya belleza e interés atrajo a multitud de naturalistas a lo largo de la historia.
Dentro del espacio natural se ubica una casona rodeada de palmeras, -la mansión de la insigne estirpe canaria de los Castro- las ruinas del antiguo fortín de San Fernando -construido a comienzos del siglo pasado, que aún conserva los antiguos cañones que sirvieron para la defensa de este sector costero- y la Gordejuela, que albergó la primera máquina de vapor de la Isla.
Cómo llegar
El acceso a la Rambla de Castro se realiza por la autovía TF-5 en el punto kilométrico 41 + 200, desviándose a la altura del Mirador de San Pedro, en Los Realejos. En dicho mirador existe un aparcamiento donde se pueden estacionar los vehículos, debiéndose realizar el acceso al interior del paisaje protegido a pie, por la pista que desciende desde el mirador.
Superficie total
45,9 Has.
Término municipal
Los Realejos.
Normativa de aprobación
Rambla de Castro fue declarada paisaje protegido por la Ley Autonómica 12/94, refundida posteriormente con la Ley de Ordenación del Territorio de Canarias mediante el Decreto Legislativo 1/2000. A efectos de controlar mejor las acciones que puedan repercutir negativamente sobre el paisaje, el anexo de la Ley 12/94 declara área de sensibilidad ecológica toda la superficie del paisaje protegido, prolongándola incluso fuera de los límites del espacio natural protegido y sobre los terrenos contiguos al mismo por el sur.